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Innisfree è una vasta tenuta di campagna immersa nella Hudson Valley a Millbrook, New York. La tenuta fu fondata nel 1930 da Marion Burt Beck, figlia dell'eccentrico barone del legname Wellington R. Burt di Saginaw. La donna ereditò la proprietà di 384 ettari insieme a una piccola parte della fortuna di famiglia nel 1919. Il nome della tenuta è stato ispirato da una famosa poesia del poeta irlandese William Butler Yeats.
Il giardino di Innisfree è stato progettato nello stile di un giardino paesaggistico inglese, con il lago Tyrell come elemento centrale. Walter Beck, secondo marito di Marion e pittore vedovo, ebbe un ruolo importante nella progettazione del giardino. Fu profondamente influenzato dalla pittura classica cinese, in particolare da Wang Wei e dalle sue immagini e poesie del ciclo Wang-ch'uan. Beck creò numerosi piccoli giardini all'interno della tenuta che raffiguravano scene pittoresche e che lui chiamava affettuosamente giardini a coppa.
Nel 2019, Innisfree è stato riconosciuto per la sua importanza storica ed è stato inserito nel Registro nazionale dei luoghi storici. Oggi il giardino è aperto al pubblico e accoglie i visitatori che desiderano esplorarne la bellezza. Sono disponibili visite guidate di gruppo per coloro che sono interessati a saperne di più sulla storia e sul design del giardino.
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Il Innisfree Garden ha 1 valutazione.
El Jardín Innisfree en Millbrook, Estados Unidos, es un paisaje sereno y hermosamente diseñado que ofrece a los visitantes un retiro pacífico en la naturaleza. Este jardín público de 185 acres está inspirado en los principios del diseño del paisaje chino y presenta una mezcla armoniosa de las tradiciones de jardinería occidental y oriental.
La pieza central del jardín es un gran lago pintoresco rodeado de plantaciones cuidadosamente seleccionadas, formaciones rocosas y senderos serpenteantes. Los visitantes a menudo elogian la atmósfera tranquila del jardín y la forma en que fomenta la contemplación y la relajación. Las estaciones cambiantes aportan diferentes aspectos de belleza a Innisfree, desde las flores de primavera hasta el follaje de otoño.
Muchos críticos aprecian la sensación natural del jardín, que difiere de los jardines con una estructura más formal. El uso de plantas nativas junto con especies no nativas crea diversos ecosistemas que atraen a diversos animales silvestres, lo que se suma a la experiencia general.
Si bien a la mayoría de los visitantes les parece que Innisfree Garden es una experiencia encantadora, algunos mencionan que puede no ser adecuado para personas con problemas de movilidad debido al terreno irregular y los caminos pavimentados limitados. Además, algunos críticos señalan que el jardín puede parecer decepcionante durante ciertas épocas del año, cuando hay menos plantas en flor.
El personal generalmente se describe como amable y conocedor, y ofrece visitas guiadas que brindan información sobre la historia del jardín y la filosofía de diseño. Sin embargo, algunos visitantes mencionan que una mayor cantidad de señalización informativa en todo el jardín mejoraría la experiencia autoguiada.
Innisfree Garden no es un museo tradicional, sino más bien una exposición viva al aire libre de arte paisajístico. Su enfoque único del diseño de jardines y la experiencia natural inmersiva que ofrece lo convierten en un destino que vale la pena para los amantes de la naturaleza, los entusiastas del arte y aquellos que buscan una experiencia tranquila al aire libre.
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